La serie de Disney+ volvió a hacer acopio de todo su talento para el frenetismo en el capítulo de ayer. Primera vez que vuelve la acción a Andor desde el atraco a Aldhani, y, de nuevo, Cassian está en todo el medio. Pero no es la única trama que da un giro inesperado en los cuarenta minutos que dura la décima parte de la primera temporada. ¡Manos a la obra y a por el resumen de Andor 1×10, que viene cargadito esta semana! Ah, y ojito, que empiezan los spoilers después de este párrafo.
En el capítulo anterior, Cassian ya empezaba a organizar a algunos reclusos para huir de Narkina 5. Hasta estaba intentando, por motivos desconocidos, serrar una de las tuberías del baño de la planta donde trabaja. Eso sí, Kino Loy, su jefe, no estaba de acuerdo con la fuga. A solo 217 turnos de salir de allí, el plan de Loy era, básicamente, agachar la cabeza y esperar a que terminara la cuenta atrás… pero su plan se iba al garete cuando se enteraban de que acababan de matar a más de cien reclusos en la planta 2. Nadie iba a salir con vida de allí.
Por su parte, Dedra Meero llegaba hasta Bix Caleen y la interrogaba sin misericordia con ayuda del doctor Gorst, el «arma secreta» del Imperio para unos interrogatorios eficaces. Gracias a la información que conseguía después de torturarla, la supervisora del ISB estrechaba el cerco sobre Luthen Rale.
Mon Mothma y la ruptura con la tradición
Es la trama a la que menos importancia se le da a lo largo del capítulo, pero creo que es una de las más cercanas a la vida real. ¿Por qué es tan fácil empatizar con la senadora? Porque puede que sea ciencia-ficción (y es muy difícil que una historia de ciencia-ficción pille a pie de calle), pero hay un punto que acerca a Mothma al nivel humano: la familia.
Recapitulo un poco. En el capítulo anterior, su amigo Tay Kolma le decía que lo mejor para justificar el descubierto en su cuenta bancaria familiar era ingresar el dinero que faltaba, para lo cual necesitaban a un banquero. Pero un banquero «honrado» no suele participar en ese tipo de trabajos, por lo que tiran de agenda para buscar a lo que se conoce coloquialmente como un prestamista. Vamos, un multimillonario sin escrúpulos (Davo Sculdon), paisano de Tay y de Mon, que termina yéndose de la casa de la senadora cuando le dice a Mothma que le dará el dinero si su hijo se casa con la hija de la de Coruscant (que tiene 13 años).
¿Por qué digo lo de que acerca al personaje de Genevieve O’Reilly a nivel humano? Porque el matrimonio tan temprano es algo que no está tan obsoleto y que sigue con las raíces bien atadas a la famosa tradición. Kolma y Mothma vienen de Chandrila, y Mon se casó con Perrin por tradición cuando ambos eran adolescentes. Ella sabe lo que es, y por eso echa al multimillonario de su salón, aunque el prestamista lo tache de «ingenuo». No es ingenuo, es instinto. Puede que la senadora no tenga la mejor relación con su hija, pero si va a protegerla. Aunque termine en un cara a cara con el Imperio.
Una guerra desde dentro: Luthen Rale y el caballo de Troya rebelde
El mayor error que comete sin fallo el Imperio es el de infravalorar la Rebelión. Película tras película, serie tras serie y trama tras trama da por muerta a la Alianza Rebelde. Quizás por la falta de recursos, quizás porque se dedican a la guerrilla y no atacan de forma frontal. O (lo que es más probable) por puro orgullo y ego.
El caso es que Dedra, que parecía que iba ganando asalto tras asalto, pierde por primera vez antes de que sonara la campana. Rale lleva muchos años en guerra y sabe lo que tiene que hacer, y Meero, con mucha menos experiencia, no esperaba un caballo de Troya: un empleado del ISB (Lonni Jung), en la nómina del hombre al que busca. Intentan tenderle una trampa para pillarle, pero Rale se va a mantener fuera del foco gracias a su doble agente.
El epicentro: «una salida» y un nuevo Andor gracias a Narkina 5
No es la primera vez que Cassian huye, pero sí es la primera vez que deja algo atrás. Y es muy curioso, me quito el sombrero con la dirección de Tony y con el guion de este episodio, porque el cambio del personaje de Diego Luna es sutil y, a la vez, catártico. El Andor que tuvo el incidente con los Pre-Mor y terminó dejando un reguero detrás en Ferrix hubiera cogido la puerta de atrás del complejo y hubiera huido sin ayuda y sin llevarse a nadie con él. Supervivencia, ¿no? Lo mismo que le dijo a Skeen cuando estaban en Aldhani.
Pero no es lo que hace en Narkina 5. Con Kino respaldándole, los dos lideran una revolución con todas las letras y atacan a los pocos soldados que vigilan el complejo. Y, por supuesto, apenas doce soldados por planta no tienen nada que hacer con los más de cinco mil reclusos que tienen explotados en cada piso de la cárcel marítima. Loy y Andor no tardan nada en llegar a la sala de control y hacerse con el complejo entero, y ahí se queda Kino completamente bloqueado. ¿Qué hace Cassian? Decirle que cada uno de los reclusos de Narkina dependen de él. Que les saque de allí. Que luche.
Es uno de los capítulos más valorados de lo que va de temporada por algo. La tensión, el compañerismo, cómo se va estrechando el hueco por el que entra el aire en cada trama… Es un trabajo ejemplar. Es la razón por la que Andor se está perfilando como una pieza clave del universo de Star Wars. Un imprescindible. Una de las mejores series que ha estrenado Disney+ hasta la fecha con diferencia. Y aún no ha terminado, así que, ¡a por todas con el capítulo 11 este miércoles!