¿Oís eso? ¡Los motores ya están en marcha! A poco más de una semana del inicio de la nueva temporada de la Fórmula 1 llega una nueva temporada de la serie documental de Netflix. Hace poco Prime Video estrenaba un documental sobre el piloto de motos Marc Márquez. Hoy recordamos la temporada pasada con nuestra crítica de la temporada 5 de Drive to Survive; no faltará el drama, las controversias y la pelea por ser el mejor de la parrilla.
Desde la emisión de la primera temporada de la serie en 2019, Drive to Survive se ha convertido en algo obligatorio para los fans del deporte de motor. Ahora recorreremos la temporada 2022 en la que Max Verstappen ganó su segundo título de una forma mucho más holgada que en 2021, donde todo se decidió en la última vuelta de la última carrera. Puede que por eso sea la primera vez que el neerlandés se pone delante de las cámaras de Netflix (habiendo boicoteado las anteriores cuatro donde se negó a salir).
La nueva era de la Fórmula 1
Esta crítica de la temporada 5 de Drive to Survive la empezamos hablando de Ferrari, una escudería que ha dado mucho que comentar este año por las estrategias que ha llevado a cabo. Pero recordemos que antes de su caída Charles Leclerc comenzó la temporada con muy buen pie adelantándose a Verstappen.
Hablamos de que en 2022 tuvo lugar uno de los mayores cambios en las regulaciones; comenzaba una nueva era para la Fórmula 1. Se prometía más competitividad, más adelantamientos y al fin y al cabo más diversión. Y Leclerc hizo caso a lo que se le requería en Baréin logrando la pole y el primer puesto, seguido de Carlos Sainz en el segundo puesto. Red Bull no tuvo tanta suerte, pues ninguno de sus pilotos terminó la carrera.
Otras escuderías como Mercedes tardaron más en recuperarse del inicio y resolver sus problemas, sobre todo del porposing (bote que experimenta el coche a altas velocidades). Al final eso terminó en nueve podios de Lewis Hamilton y ocho para George Russell, que además logró la primera victoria en su carrera.
Pero a pesar de la promesa y los intentos de hacer la Fórmula 1 más competitiva nos dieron algo a lo que ya estábamos acostumbrados sin mucha novedad.
El futuro se juega en el asfalto
La primera polémica de la temporada no tardó mucho en llegar. Lo hizo antes incluso de la primera carrera. Cuando comenzó la guerra entre Rusia y Ucrania Hass debía decidir qué hacer con su piloto ruso Nikita Mazepin. Todo terminó con su salida del equipo y la vuelta de Kevin Magnussen después de un año alejado de los coches. Eso no le suponía ningún problema, terminó quinto en la primera carrera.

Ya con la parrilla completa la temporada seguía su curso. Carrera tras carrera se iba definiendo la tabla de puntos y Verstappen cogía carrerilla a la vez que Ferrari empezaba a fallar. Mientras que había alguna guerra interesante, como, por ejemplo, la que tuvieron Leclerc o Sergio Pérez por el segundo puesto en el campeonato (algo que se ha omitido en la serie toalmente) o la de McClaren y Alpine por el cuarto puesto en la liga de constructores, Verstappen se separaba más y más haciéndolo campeón tempranamente; algo que al final le quita emoción al deporte.
Porque lo que más nos interesa de ver es el drama, y de eso hemos tenido mucho. Desde los rumores de Hamilton dejando la Fórmula 1 o la duda de si algunos pilotos como Mick Schumacher renovarían contrato a pesar de conseguir sus primeros puntos en la competición. Y en eso Drive to Survive lo hace bien, va a donde duele.
Cuestión de vida o muerte
También hemos visto duros accidentes. Uno de los más gordos que se ha visto en la historia del deporte fue el de Guanyu Zhou en Silverstone donde recorrió muchísimos metros con el coche boca abajo y terminó chochándose con las barreras. Muchos accidentes también de Schumacher por los que finalmente se decidió finalizar su contrato. Este año será piloto reserva de Mercedes.

Coches en llamas de Pierre Gasly y Carlos Sainz, batallas para la historia… Desde luego que nos dieron muchas anécdotas la temporada pasada. No olvidamos la primera pole y victoria de Sainz en Silverstone. Además, de darnos un gran meme con su frase stop inventing.
Pero el drama, como veréis, no termina aquí. Es un año en el que han terminado muchos contratos, y no de la mejor forma. Veremos de una forma más profunda cómo se tomaron las decisiones que han hecho que Fernando Alonso salga de Alpine y vaya a Aston Martin, la polémica llegada a la Fórmula 1 de Oscar Piastri y el ascenso de Nick De Vries (los rookies este 2023). Aunque De Vries, que corrió en cinco escuderías diferentes, debutó con Williams en Monza e incluso logró llegar a los puntos. ¿De Vries? ¿Debris? La confusión seguro que crea momentos graciosos este año.
Adiós a uno de los grandes
Pero a quien no veremos más es a Vettel, que sorprendió anunciando su retirada en un mensaje en Instagram en el que decía que quería dedicarse más a su familia. La serie le hace una despedida por todo lo alto. Ojalá haber estado en esa cena con todos los pilotos, pero lo dejaron para el ámbito privado. Daniel Ricciardo también anunció que se iba (preguntaba qué iba a ser ahora de Drive to Survive sin él). Pero finalmente no se irá muy lejos, será el piloto reserva de Red Bull.
Y es que no solo los veinte pilotos son los protagonistas, también lo son los directores de las escuderías. Aunque a algunas como Alpha Romeo o Williams pasen más desapercibidas, todos tienen un mínimo hueco en la serie. Si tenemos que nombrar a los que más protagonismo tienen, esos son el carismático Guenther Steiner (Hass), Toto Wolff (Mercedes), Christian Horner (Red Bull), Mattia Binotto (Ferrari) y Zac Brown (McClaren). A ellos los veremos en los momentos más tensos y decisivos, pero también los veremos en entornos más familiares donde tratan de acercarnos a su vida cotidiana fuera de los circuitos.
La serie dedica un episodio entero a la controversia que hubo cuando se supo que Red Bull había rebasado los límites en los presupuestos. Cómo toda la parrilla y los fans les empezaron a increpar a pilotos y directivos. Todo se resolvió con una multa, pero para muchos a día de hoy todavía les parece poco.
Como pasa con los pilotos, hay circuitos que tienen más protagonismo como Silverstone, Mónaco, Baréin, Bakú, Abu Dabi y Suzuka entre otros. Luego, Monza, Imola, Barcelona y algún otro se les menciona por encima. Realmente dejando sucesos que podría haber sido interesante ver. Aunque tenemos que asimilar que no todo puede estar en pantalla.
Más espectáculo y ¿más emoción?
Ha habido otras novedades en la temporada además de la nueva normativa. Fue la primera vez que tuvo lugar el GP de Miami. Este 2023 será el turno de Las Vegas. Aunque, sin duda, son circuitos donde se busca más el espectáculo que la carrera en sí.

Esta temporada tampoco fue demasiado emocionante en cuanto al campeón, ya que alcanzado cierto punto de la temporada siempre ganaba el mismo. Pero menos mal que la edición de Drive to Survive es muy dinámica y parece que hubo más emoción de la real. Hemos podido colarnos en los garajes y seguir a los equipos en su día a día, en lo bueno y en lo malo. Nos ha enseñado la buena relación de algunos pilotos como Gasly y Tsunoda, Norris y Ricciardo o Leclerc y Sainz. Sigue la estela de las anteriores donde podemos conocer un poco más de la Fórmula 1 y que incluso la da a conocer a muchos espectadores.
Los diez episodios llegan hoy a Netflix. ¿Estáis emocionados por volver a revivir la temporada 2022? Este año veremos muchas caras nuevas, pero para verlo en Netflix tendremos que esperar al año que viene.
Crítica rápida de Drive to Survive temporada 5: ¿por qué ver la serie?
- Un punto de vista más natural e íntimo
- Ver desde dentro el trabajo de los pilotos u su equipo
- Revivir la temporada de 2022 con sus alegrías y penas